Se mantienen fríos a altas temperaturas

El maravilloso aroma del pan embriaga el ambiente. Cada día, los hornos de Harry-Brot en Soltau producen unas 180 000 rebanadas de pan de molde. Una vez están recién horneados, pasan por la sección de producción y luego se envasan y se cargan en camiones para emprender su viaje a los supermercados de toda Alemania. Se trata del mayor fabricante de productos de panadería con un nombre ampliamente conocido, que ofrece una gama que incluye desde pan integral hasta pan de molde para hacer tostadas y sándwiches.

Para que todo funcione a la perfección, los sistemas deben trabajar sin cesar. Sin embargo, no siempre ha sido así. Las averías relacionadas con el calor solían ser un hecho frecuente en la planta, y se debían principalmente al fallo de la tecnología de control que estaba instalada en los armarios. Esta situación acarreó unas consecuencias importantes. «Cuando nuestros sistemas se caen, también se paralizan nuestros camiones, y no podemos repartir el pan. Es un gran problema, porque nuestros clientes esperan encontrar pan fresco en las estanterías de los supermercados todos los días», explica Björn von Frieling, jefe de taller de la planta.

La masa del pan avanza por una cinta transportadora. Si los sistemas se caen, también se paralizan los camiones y no se puede repartir el pan.

Aunque las temperaturas por fuera del armario pueden alcanzar a menudo los 45 grados, las temperaturas en el interior son mucho, mucho más mayores. Anteriormente se ha podido calcular que alcanzaban una temperatura de entre 60 y 70 grados, lo que está lejos de ser unas condiciones ideales para unos equipos electrónicos sensibles, especialmente cuando se alojan en armarios compactos relativamente pequeños. En lugar de utilizar unidades de climatización, Harry-Brot había estado utilizando simplemente para estos armarios ventiladores con filtro. Recurrió a esta solución por una sencilla razón. «Los refrigeradores de vanguardia Blue e+ de Rittal, que además son energéticamente eficientes, hasta ahora solo estaban disponibles con potencias de refrigeración elevadas de al menos 1,6 kW, lo que definitivamente suponía unas potencias demasiado altas para nuestras aplicaciones», explica von Frieling.

Por eso recibió de manera muy positiva el lanzamiento al mercado de Rittal de las nuevas unidades Blue e+ S con unas potencias de refrigeración más bajas. «Son ideales para los niveles de calor que generan nuestras aplicaciones. Tras consultar con el equipo de ventas de Rittal, acordamos realizar una prueba aquí en la planta para ver cómo funcionaban estas unidades con nuestras operaciones», dice.

UNA PRUEBA CON RESULTADOS SORPRENDENTES

Además de garantizar una alta disponibilidad del sistema, Harry-Brot también considera que la reducción de la huella de carbono de la empresa es un objetivo clave, y por ello prefiere invertir en tecnologías que sean eficientes desde el punto de vista energético. Por este motivo, se decidió aprovechar la prueba para comparar el nuevo refrigerador Blue e+ S, energéticamente eficiente, con la unidad Blue e que había estado disponible anteriormente y que contaba con una potencia de refrigeración menor. En el caso de ambas unidades (500 W), el consumo de energía se midió continuamente durante la prueba.

El resultado de los cinco primeros meses supuso una sorpresa para von Frieling. «No esperaba tal resultado», revela. La unidad Blue e+ había consumido solo 248 kWh de energía eléctrica, frente a los 626 kWh de la unidad Blue e, lo que equivale a un ahorro del 60 % durante todo el periodo de la prueba y de 884 kWh durante todo el año.

Partiendo de un precio medio de la electricidad industrial de unos 26 céntimos por kilovatio hora, de esta forma Harry-Brot puede conseguir un ahorro anual de unos 230 euros por cada refrigerador. Además, en las unidades Blue e+ se integra un evaporador del agua de condensación. Si se excluye la parte del consumo de energía que corresponde a esta función, el ahorro es de más de 260 euros por cada refrigerador.

LAS AVERÍAS PRONTO SERÁN UNA COSA DEL PASADO

Sin embargo, para von Frieling es aún más importante la mayor disponibilidad que se consigue con la climatización de los armarios. Una climatización eficaz de los armarios se traduce en un menor número de averías. «Esto supondrá una mayor facilidad para garantizar la entrega de pan fresco», insiste. Las paradas de producción provocadas por temperaturas excesivas en los armarios también son perjudiciales para la sostenibilidad.

Implica la sustitución o la reparación de los componentes, lo que requiere mano de obra y materiales. El nuevo sistema de climatización para los armarios permitirá prescindir de estos recursos. En un futuro próximo, decenas de armarios de Harry-Brot estarán equipados con refrigeradores Blue e+ S.

UNA MAYOR REDUCCIÓN DEL CONSUMO DE ENERGÍA

La alta eficiencia energética de la climatización de los armarios contribuye a una estrategia corporativa a largo plazo que ya se ha iniciado para toda la operación de producción. Entre 1999 y 2018, el consumo de energía por tonelada métrica de harina se redujo de unos 1200 kWh a poco más de 800 kWh.

Las unidades Blue e+ S están ayudando a reducir aún más esta cifra, y, por este motivo, von Frieling también puede imaginarse incorporar estas unidades en otras sedes de la empresa en el futuro.